El año hidrológico 2011-2012 comienza manteniendo unos niveles máximos históricos de agua embalsada
Miércoles, 5 de Octubre de 2011
Fuente: Geoscopio/Madrid. Las presas de la comunidad, que se encuentran al 75,5% de su capacidad, cumplen con las condiciones de seguridad establecidas en sus normas de explotación frente a posibles avenidas
Las reservas de los embalses, una vez concluido el año hidrológico (del 1 de octubre de 2010 al 30 de septiembre de 2011) y tras haber finalizado la campaña de riego (el 15 de septiembre de 2011) se sitúan en una media de llenado del 75,5% de su capacidad, con más de 9.000 hectómetros cúbicos de agua embalsados. Una cifra que mantiene los niveles máximos históricos de llenado del pasado año hidrológico (2010-2011), cuando la capacidad media se situaba en algo más del 74,6% y el agua embalsada superaba los 8.830 hectómetros cúbicos y ampliamente superior a la del año 2009-2010, que comenzó con tan solo un 34% de agua embalsada. Este porcentaje garantiza el normal abastecimiento a la población y el resto de usos durante todo el año hidrológico que acaba de comenzar.
Estos altos niveles de llenado de los embalses se deben principalmente a las aportaciones de agua de lluvia del pasado otoño e invierno, fundamentalmente durante el mes de diciembre que fue excepcionalmente lluvioso en la cuenca del Guadalquivir. Los altos valores pluviométricos (agua de lluvia acumulada) registrados en los cuatro distritos andaluces han superado los máximos de los últimos 20 ó 25 años atrás, lo que ha provocado unas aportaciones de agua superiores a la media histórica a los embalses de prácticamente toda Andalucía. La lluvia, junto con las amplias reservas de agua almacenada el año hidrológico anterior, han permitido mantener los volúmenes embalsados en niveles que se sitúan por encima de la media de otros años.
Durante este año hidrológico los importantes aportes de agua a los ríos, debido a las precipitaciones, han podido ser laminadas gracias a la regulación de los embalses, fundamentalmente en la cuenca del Guadalquivir. Los desembalses de agua, además de laminar las avenidas, han conseguido que todas las presas andaluzas sigan manteniendo las condiciones de seguridad establecidos en sus distintas normas de explotación para hacer frente a las posibles lluvias del próximo otoño-invierno.
Por distritos hidrográficos, el Guadalquivir ha finalizado el año hidrológico (fecha del 30 de septiembre) con más de 5.988 hectómetros cúbicos embalsados (75% de llenado); el distrito Guadalete-Barbate acumula 1.328 hectómetros cúbicos (80,4% de llenado); el Tinto-Odiel-Piedras supera los 684 hectómetros cúbicos (80% de llenado) y el Mediterráneo mantiene unas reservas de 813 hectómetros cúbicos (69% de llenado).
Guadalquivir
La pluviometría media registrada en los embalses de la cuenca ha sido de 821 litros por metro cuadrado, un valor que supone un máximo en la serie histórica de los últimos 25 años. Cabe destacar la lluvia registrada durante el mes de diciembre de 2010, que resultó ser excepcionalmente lluvioso con una media mensual de 285 litros por metro cuadrado, mientras que el valor medio histórico es de 96 litros por metro cuadrado.
Las aportaciones de agua a los embalses de la cuenca, por tanto, también han alcanzado valores máximos muy altos, cerrando el año hidrológico con 5.988 hectómetros cúbicos de agua (75% de llenado). Durante todo el año, los recursos embalsados se han mantenido prácticamente en máximos históricos, al igual que ocurriera el año anterior desde el mes de marzo.
Durante la campaña de riego (del 1 de junio al 15 de septiembre de 2011) el sistema de regulación general de la cuenca del Guadalquivir ha desembalsado 870 hectómetros cúbicos. Esta cifra supone un ahorro de agua con respecto a lo aprobado por la Comisión de Desembalse de 330 hectómetros cúbicos, gracias a un uso eficiente del agua por parte de los regantes. Asimismo, en este mismo periodo ha circulado por la presa de Alcalá 430 hectómetros cúbicos de agua, lo que ha permitido mantener la salinidad del estuario (zona arrocera) en valores mínimos históricos durante toda la campaña.
En definitiva, la campaña de riego se ha desarrollado con plena normalidad en la cuenca del Guadalquivir, cumpliéndose con normalidad los acuerdos adoptados en la Comisión de Desembalse del pasado 27 de mayo, donde se acordó un desembalse 1.200 hm3 de agua en el sistema de regulación general, con una reserva de 400 hectómetros cúbicos destinada a la zona arrocera.
Estas reservas hacen posible garantizar las demandas tanto de abastecimientos como de zonas regables durante el próximo año hidrológico en toda la cuenca.
Guadalete-Barbate
La lluvia ha sido la principal protagonista en este distrito hidrográfico, alcanzándose valores máximos en la serie histórica registrada durante los últimos 25 años. Concretamente una media acumulada en el Guadalete de 776 litros por metro cuadrado y de 914 litros por metro cuadrado en el Barbate, cuando la media histórica asciende a 681 litros por metro cúbico y a 753 litros por metro cúbico, respectivamente.
Estas lluvias se han traducido en importantes aportaciones de agua, lo que ha asegurado el mantenimiento de los recursos embalsados, que se sitúan en un porcentaje de llenado del 80,4%, con más de 1.328 hectómetros cúbicos de agua almacenados, un nivel ligeramente inferior al comienzo del año hidrológico en el que se situaban al 82% de capacidad (1.359 hectómetros cúbicos).
La campaña de riego en ambos sistemas se ha desarrollado con normalidad y se han atendido a la totalidad de las demandas, al igual que el suministro de agua potable de la Zona Gaditana o Tarifa.
Tinto-Odiel-Piedras
El promedio de lluvia acumulada en el distrito onubense alcanza los 1.087 litros por metro cuadrado, que han tenido como consecuencia unas aportaciones de agua muy elevadas a todos los embalses del distrito fundamentalmente durante los meses de diciembre, marzo y mayo.
Al final del año hidrológico, los embalses onubenses se encuentran en un 80% de capacidad, con 884 hectómetros cúbicos almacenados. Esta cifra es bastante superior a la del comienzo del año hidrológico (648 hectómetros cúbicos) sobre todo debido a la puesta en carga del embalse del Andévalo.
Estos niveles garantizan la demanda de todos sus sistemas de explotación (Andévalo-Chanza-Piedras-Los Machos, Jarrama y Corumbel). En este año hidrológico que se acaba de cerrar, las demandas de abastecimiento y riego se han atendido con absoluta normalidad.
Mediterráneo
Los niveles pluviométricos registrados en el Distrito Mediterráneo han sido ligeramente superiores a la media histórica. Con una lluvia acumulada de 679 litros por metro cuadrado, superando en un 24% el valor medio de los últimos 25 años.
Las aportaciones de agua han sido superiores a la media anual de los últimos 25 años, lo que ha supuesto el máximo llenado de todos los embalses del distrito (salvo el de Cuevas de Almanzora), con una media del 69% de capacidad y 813 hectómetros cúbicos de agua embalsados. Unos niveles que se mantienen iguales a los del comienzo del año hidrológico.
La campaña de riego en los diferentes sistemas de explotación de las cuencas mediterráneas se ha desarrollado con plena normalidad y se han atendido todas las demandas.